Del Revés (Inside Out): Risas, emociones y lecciones

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Hace poco más de un año tuve la ocasión de asistir a un evento organizado por Disney en el que se nos presentaba al mismo tiempo Guardianes de la Galaxia y la próxima película de Pixar, Inside Out (ahora titulada Del Revés). La de Guardianes íbamos a verla pronto y nos mostraron escenas prácticamente acabadas, mientras que para la de Pixar, con un año de margen, las escenas que nos enseñaron estaban en una fase bastante inicial, pero aún así, fueron capaces de generar unas expectativas enormemente positivas. Nos prohibieron hablar de lo que habíamos visto, así que ha sido un año de morderse la lengua y esperar con muchas ganas que finalmente se estrenara. Y el aluvión de críticas positivas que nos iban llegando no sorprendían en absoluto, con esas cuatro escenas que había visto estaba convencido de que iba a ser un peliculón, y lo es. La película ha sido capaz de estar a la altura de un año de creciente hype.
Si bien tenemos a una supuesta niña protagonista, con una historia de lo más sencilla, realmente el foco de atención se centra en la que pasa dentro de su cabeza, literalmente. Sus emociones cobran vida, y son las encargadas de dirigir el puente de mando de la mente de la niña, de nuevo, literalmente. Como si fuese Star Trek, las cinco emociones básicas (alegría, tristeza, asco, ira, miedo), pilotan las acciones de la chica con su consola de acciones y reacciones. Dichas emociones no se han escogido simplemente por la posibilidad de enfrentarlas entre sí con cómicos resultados, sino que algunos expertos consideran que son las cinco emociones básicas que tenemos al nacer. De hecho, si bien a primera vista puede parecer que Inside Out es solo un ejercicio de humor basado en personajes caricaturescos, en realidad el trabajo de documentación es evidente, y la forma como nos van explicando el funcionamiento de la psique de una pre-adolescente simplemente excelente (y os habla un licenciado en Psicología). No parece fácil explicar como funcionan nuestras emociones (de hecho, nos queda mucho por aprender), pero el mérito de Inside Out es que te lo explica casi sin que te des cuenta. Las metáforas que utiliza pueden ser muy llamativas para los niños, y divertidas para todos, pero todo lo que hay detrás nos demuestra que una película de animación es capaz de hacer lo que sea, incluso ponerse en plan académico (e insisto, sin que apenas te enteres). De hecho, hay tanta chicha ahí metida, que algunos incluso cuestionan si realmente la película es apta para niños o no. Lo que nos muestra la película, a través de la aventura que vivirán Alegría y Tristeza perdidas en los recónditos lugares de la psique de la niña protagonista, no deja de ser un viaje hacia la pubertad (aunque sin llegar aún a ella, ¿quizás para la segunda parte?). Y es con ese paseo como nos harán descubrir de qué manera pasamos de esas cinco emociones básicas a otras algo más complejas y mezcladas, y que además, todas ellas tienen su razón de ser, incluso las negativas.
Quizás es el mensaje lo que un niño de menos de cinco años no va a entender o poder apreciar a escala emocional, pero creo que hay suficientes elementos de diversión a lo largo de toda la película para que los niños puedan reír y encariñarse con los personajes. Y es que como decía, el gran mérito de la película es que te enseña al mismo tiempo que te divierte, e incluso, te llega a emocionar como ya lo hizo “Wall-E”, “Up” o “Toy Story 3”. No me voy a cortar, y voy a proclamar que “Inside Out” es probablemente una de las mejores películas de Pixar, incluso después de titanes como los ya mencionados. Que en poco más de hora y media te hagan reír cada dos por tres, emocionarte nivel lagrimilla, y que al mismo tiempo salgas con una lección aprendida, es para quitarse el sombrero. ¡Chapeau, Pixar!
Lo mejor: Es simplemente una película redonda.
Lo peor: Que se den cuenta de tus sollozos en el cine mientras ves la peli.