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Hace ya siete años del nacimiento de lo que sin duda fue (y es) el film de terror español que redefinió el genero dentro y fuera de nuestras comerciales fronteras.
La logradísima saga de REC contó como padres de la criatura acon Jaume Balagueró artífice de las acertadas (“Los Sin Nombre” 1.999, “Darkness” 2.002, “Mientras Duermes” 2.011) y Paco Plaza progenitor de las no tan acertadas (“El Segundo Nombre” 2.002 y “Romasanta” 2.004) , ambos crearon conjuntamente el origen de algo que en un muy breve espacio de tiempo se convertiría no solo en la “archiconocida” versión patrio de la saga “Resident Evil” Paul W. Anderson 2.002, sino en un icono admirado, vanagloriado y copiado con una legión de fans extendida por todo el mundo, dando lugar a 3 taquilleras películas donde ha habido cabida para el terror en estado puro 100% real, carnal y escalofriante “Rec” 2.007, la acción más intensa fría y desesperada en “Rec 2” 2.009, y la ácida, fresca y descarada “Rec 3” 2012 (está injustamente poco valorada fue dirigida solo por uno de sus padres, Paco Plaza) y por fin la que nos ocupa “Rec 4” el esperado cierre que llega casi 8 años después de su nacimiento de la mano de la dirección individual de Jaume Balagueró.
Producción que en palabras de su propio director “es una montaña rusa de emociones que mantiene entretenido al espectador de principio a fin”, film que toca muy de cerca otros conceptos de terror y que se atreve a coquetear con la acción más tosca y comercial y la social realidad de un país que en la actualidad vive con el miedo a que una pandemia se desencadene de un momento a otro arrojándonos a un sentenciado apocalipsis final; estos son los elementos claves de un acertado (aunque vago) film de terror que despide y cierra una saga que nos ha dado tantas alegrías y satisfacciones como pesadillas, y que sin hacerlo mal del todo nos aproxima a un subgénero de terror como es el “survivall” donde la razón única de la supervivencia de la población española depende de la infatigable mano (hachada) de una Manuela Velasco que (es la única que lo da todo en el film), como nuestra heroína y particular teniente Ripley “Alien, el Octavo pasajero” Ridley Scott 1.979, dentro de una fácil aunque sorprendentemente digna y eficaz propuesta de despedida, donde la claustrofóbica acción pasa a trasladarse de un antiguo edificio de Barcelona a un enorme barco trasatlántico donde la epidemia zombie se extenderá de cabo a popa del Zaratustra regalándonos una muy variada selección de homenajes y guiños al maravilloso mundo del genero como “The Thing, La Cosa” John Carpenter 1982 y “Species” Roger Donaldson 1.995 donde la sexy protagonista alberga (o no) en su interior al huésped devastador.
En conclusión decir que “Rec 4” no es buena y que no es divertida y brutalmente entretenida sería mentira pero también lo sería decir que este era el cierre que nos esperábamos para una queridísima saga que mucho me temo puso el listón demasiado alto con su predecesora “Rec” y la innegable joya que es “Rec 3”.
Lo mejor: Manuela Velasco y un clímax final muy divertido.
lo peor: un guión cómodo en los que apenas hay momentos “super power” en los que nuestra Manuela Velasco puede volverse loca, como a nosotros nos gusta.
REC4: ¿Apocalipsis?
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