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Está película lleva a la gran pantalla la historia de Philippe Petit, el funambulista, que se atrevió a cruzar las torres gemelas el 7 de agosto de 1974. Pero esta historia es mucho más, nos transmite la pasión de perseguir sueños, de realizar algo que parece imposible y que además es ilegal. Robert Zemeckis ha tenido buen ojo, para escoger su historia, igual era fácil, ya que esta historia ganó en formato documental como ‘Man on Wire’ un Oscar en 2008, así como galardones en el Festival de Sundance o un premio BAFTA.
Está claro que estamos ante una hazaña superlativa, nada fácil de conseguir y que tiene interés para los espectadores. Pero la otra clave para que la película funcione es la elección del actor principal, Joseph Gordon-Levitt, el actor de 34 años lo borda, poniéndose en la piel de Philippe Petit con un perfecto francés y una interpretación magistral. La explicación de su gran dominio del francés y su buen acento, viene porque el actor estudió literatura y poesía francesa en la universidad de Columbia en Nueva York.
La película narra de manera cronológica como el personaje crece y va ganando interés por el mundo del espectáculo, alcanzando su climax en su famoso cruce de las torres que desaparecieron el 11 de septiembre de 2001. Philippe en su juventud empieza trabajando en un circo donde Ben Kingsley, que interpreta a un veterano funambulista, acabará convirtiéndose en su maestro y mentor. Después el joven Phillipe tiene una etapa en la que fue en uno de los primeros juglares callejeros modernos de París haciendo un espectáculo de equilibrismo, mimo, monociclista y mago. Es en esa época conoce a su amada Annie (Charlotte Le Bon) que le acompañará y le apoyará hasta el final de su aventura.
De manera casual, estando en una sala de espera del dentista, Phillipe coge una revista que le informa que las Torres Gemelas serán las torres más altas del mundo cuando estén acabadas. Es allí donde empieza su obsesión, y empieza a prepararse y a buscar contactos y recursos que le ayuden a dar “el golpe”. Finalmente tras infiltrarse con su equipo en las torres y estudiar bien como instalar y pasar el cable entre las dos torres se decide a cumplir su sueño. Para hacerlo pasa toda la noche escondido en las torres instalando su cuerda y sobre las 7:30 de la mañana empieza el espectáculo. La policía llega rauda y veloz a las torres, pero antes de detenerlo presenciarán un espectáculo único que jamás se repetirá.
Hay que reconocer que el veterano director de Regreso al Futuro o Forrest Gump, nos ha regalado una película cargada de pasión, energía, suspense y optimismo. Este hecho de por sí, ya la convierte en una buena propuesta cinematográfica, pero es que además visualmente está muy conseguida, jugando con los efectos 3D para dar una sensación de vértigo real al espectador. Muy recomendable sin duda para disfrutar y dejarse tocar por la pasión de conseguir realizar sueños.
The Walk
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