TIPOS LEGALES: LOS VIEJOS ROCKEROS NUNCA MUEREN!

Si reúnes a tres tipos como son Al Pacino (El Padrino, Heat), Christophen Walken (La Zona Muerta, El Cazador) y Alan Arkin (Argo, Pequeña Miss Sunshine), por muy, muy talluditos que estén (la verdad es que están algo cascaos), estos tres escualos de la pantalla son toda una garantía. Para toda una generación que hemos crecido con algunas de las películas que significaron el cambio respecto al Hollywood clásico, El cazador (1978), Apocalyse Now (1979), Toro Salvaje (1980),etc…actores como Marlon Brando o el propio Al Pacino, también desarrollaron su método gracias a la  influencia del cine europeo.
Tipos Legales, otra decepcionante traducción comercial del original, mucho más revelador, Stand Up Guys, nos cuenta la historia de tres amigos que vuelven a reencontrase después de muchos años de inactividad, quizá ya demasiados, para volver a las calles, como si fueran, otra vez, los putos amos del local, pero no os penséis que estamos ante un Lock & Stock (1998) o un RocknRolla (2008). El tratamiento de la acción no verbal es totalmente creíble, porque estos tres tipos legales nos hablaran de tantas cosas, que tendremos que estar muy atentos. Es un film nostálgico a primera vista, otoñal, lo que pudo a ver sido y ya no volverá a ser, porque el tiempo no perdona y fuck!! tu jodido cuerpo ya no te acompaña (bueno…con viagra todo es posible). Hay una frase demoledora que lo resume todo en una de las escenas previas cunado se disponen a repartir justicia a los niñatos del barrio: disfrútalo!!, disfrútalo de verdad, porque la diferencia es que ahora sí podemos valorarlo!. Sólo el paso del tiempo, sólo las arrugas de la mirada, (hay gente que envejece pero que no ha visto nada) te dan la perspectiva que no tienen los que aún no han llegado a la madurez. Lo que a priori podría ser una sentencia de muerte entre dos amigos, lo que a priori podría ser el último vuelo a lo Space Cowboys (2000), es una reivindicación a gritos y a tiros de que la juventud es un músculo del cerebro, no del gym.
Fisher Stevens, es un director casi debutante porque, principalmente, es actor. Conocido por aquella simpática producción de los 80′, Cortocircuito (1986), ha actuado para casi todas las series televisivas que podáis recordar, pero es ahora en su nueva faceta de documentalista que tras rodar con cámaras escondidas la caza de defines en la cala japonesa de Taiji que ganó el oscar al mejor documental por The Cove (2010). Os recomiendo que lo veáis, es realmente impresionante.
El mérito de Tipos Legales es el equilibrio entre los diferentes temas que se tocan, sin más azúcar ni menos sal, un punto dramático exacto y sin bromas excesivas cuando ponemos a unos casi abueletes con sus achaques y rodeados de cambios tecnológicos que propician el gag adecuado para desengrasar. Lo mejor, sin duda, su ritmo, cuando parece que no hay más, aprieta el acelerador y vuelve a decelerar.
Tipos Legales me ha recordado por su dirección y guión al otro canto del cisne que es para mí la ya cult movie, Gran Torino (2008) de Clint Eastwood. El único pero que le pongo, es la BSO, no es porque pida temas made in Tarantino o a lo Guy Richie, pero con la partitura perfecta estaríamos hablando ahora de otro film casi perfecto,increíblemente interpretado, muy bien escrito, correctamente filmado y de una carga temática tremenda para los tiempos que corren, entre tanta superproducción vacua (El Atlas de las Nubes, Wachowski bros), o divertimentos digitales (Oblivion, Joseph Kosinski).
Cualquier tiempo pasado será mejor…si lo hemos vivido cada día, cada hora, cada minuto…