Up in the air nos cuenta la historia de Ryan Bingham. Un hombre solitario, aislado de los otros y sin hogar aparente. No tiene ni mujer, ni hijos, tiene un piso vacío que solo visita unos cuarenta días al año, pero Ryan es un hombre feliz. Quizás sea porque tiene el trabajo perfecto para esta época de crisis, se dedica a despedir a la gente. Cuando una empresa necesita deshacerse de algunos de sus trabajadores, y no tiene estomago para afrontarlo, ahí entra Ryan Bingham, un experto en intentar hacerte creer que uno de los peores días de tu vida, es en realidad una oportunidad.
No es que a Ryan le encante despedir a la gente. Es su trabajo y lo hace muy bien. Lo que realmente le encanta es lo que su trabajo comporta, volar de ciudad en ciudad sin parar, dormir en hoteles, y acumular puntos de viajero frecuente. Esta vida se ve amenazado por la joven Natalie, una nueva compañera de trabajo que quiere informatizar todo el sistema, haciendo que se pueda despedir a alguien sin tener que moverse. Esto a Ryan no le convence y se lleva a Natalie con él para que pueda ver lo que realmente supone despedir a alguien.
Durante sus viajes, Ryan también se encuentra a Alex, una alma gemela, que parece compartir el mismo camino viajando de ciudad en ciudad y compartiendo cama con el Sr. Bingham cada vez que coinciden. Estas dos mujeres harán que Ryan se cuestione si la vida que lleva realmente le complace, y los resultados no son ni típicos, ni obvios.
En un clima de crisis económica, Jason Reitman (el director) decide explorar las relaciones humanas de una forma original y fresca. Esta es una película sencilla y bien hecha que difícilmente se puede clasificar como Comedia o Romántica. Nos enseña como las decisiones que tomamos no solo afectan nuestras vidas, si no también las vidas de los demás.
El único problema que podría tener Up in the air, son las expectativas puestas en ella. Para muchos críticos, esta es la mejor película del 2009 y quien lo vea esperando que sea así se puede llevar una decepción. Lo que si es cierto es que George Clooney hace una de las mejores interpretaciones del año, y lleva completamente el peso de la película, lo que debería ser premiado con una nominación a los oscars.
